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3 de diciembre de 2005

Alonso guarda los secretos de la F-1



Fernando Alonso ha defendido a ultranza el secretismo que reina en el circo de la Fórmula 1. Según el piloto asturiano "hasta la gente que trabaja en mi equipo me tapan los motores con una manta".

Alonso reflexionó acerca de la forma de ser de los pilotos en un acto organizado por la Cadena SER. "Somos introvertidos y no me extraña. Con todos los secretos que llevamos en el coche es mejor no hablar con nadie. La gente que trabaja en mi equipo me tapan los motores con una manta a mi si voy a París a visitarles".

El piloto contó curiosidades como los seis cinturones de seguridad que le protegen en cada carrera, las funciones de cada botón de su volante o los 18.000 euros que cuesta cada neumático por los 4.000 del casco.

Alonso repasó las carreras del Mundial de automovilismo y recordó su primer triunfo y la anécdota de acabar deshidratado por un problema en su casco con la llegada del agua.

Fisichella se queda sin carné de conducir por exceso de velocidad

El italiano Giancarlo Fisichella, piloto de la escudería Renault, ha visto cómo la policía le retiraba su carné de conducir por exceso de velocidad en la carretera.

El hecho, según se ha informado, aconteció sobre las 4.30 de la mañana (03.30 gmt) de este domingo, cuando Fisichella conducía su vehículo a 148 km/h. en una zona donde el límite máximo está fijado en los 60 km/h.

El vehículo de Fisichella fue detenido por la policía, que estaba realizando una serie de controles en una zona de discotecas en las afueras de Roma, y que procedió a retirar el carné de conducir al piloto.

Se da la circunstancia de que Fisichella participa en una campaña sobre la seguridad vial e, incluso, esta misma semana compareció en un programa de televisión de ámbito nacional para solicitar prudencia a los jóvenes conductores ante un grave accidente en Roma, donde falleció un menor y otros están en grave estado.

Fisicella ha justificado su exceso de velocidad señalando que volvía a casa rápidamente ya que la persona que cuidaba a su hijo le había telefoneado a su esposa, que estaba junto a él, para decirle que la criatura tenía bastante fiebre.